Por fin, el fin
Por fin acabaron las clases, los exámenes, los ejercicios y los proyectos... hasta el semestre que viene... y mientras tanto, ¿qué? Pues mientras tanto me quedo en Austin, he encontrado un trabajillo de verano, voy al cine (no os cuento shrek 3 para no fastidiar :-P), hago algo de ejercicio (que buena falta me hace) y me despido de todos los estudiantes de intercambio que poco a poco vuelven a sus casas, para no volver.
Con muchos de ellos he pasado momentos que no olvidaré nunca y, con algunos, momentos que desearía ni recordar... pero en general, todos han sido una inspiración, una referencia, un amigo... a ellos les debo mucho de estos cuatro últimos meses... y puede que no los vuelva a ver.
Con casi todos tuve un momento para despedirme en persona, aunque a veces no fuera tanto tiempo como me gustaría (¿verdad Vicky?), otras ha sido medio despedidas y ha habido algunos que se me han escapado sin una despedida en persona... (lo siento Aya).
Pero la vida sigue y no puedo saber qué pasará dentro de dos meses, ni dentro de dos días (si no, echaba la lotería y ya seguro que no me veíais el pelo :-P)... espero encontraros alguna vez en algún lugar... quién sabe... ¿un café en Praga? ¿un bombón en Brujas? ¿un croissant en París?
El mundo es tan pequeño... y tan grande...
Con muchos de ellos he pasado momentos que no olvidaré nunca y, con algunos, momentos que desearía ni recordar... pero en general, todos han sido una inspiración, una referencia, un amigo... a ellos les debo mucho de estos cuatro últimos meses... y puede que no los vuelva a ver.
Con casi todos tuve un momento para despedirme en persona, aunque a veces no fuera tanto tiempo como me gustaría (¿verdad Vicky?), otras ha sido medio despedidas y ha habido algunos que se me han escapado sin una despedida en persona... (lo siento Aya).
Pero la vida sigue y no puedo saber qué pasará dentro de dos meses, ni dentro de dos días (si no, echaba la lotería y ya seguro que no me veíais el pelo :-P)... espero encontraros alguna vez en algún lugar... quién sabe... ¿un café en Praga? ¿un bombón en Brujas? ¿un croissant en París?
El mundo es tan pequeño... y tan grande...